The AbyssVolver al Indice


Virgil y Hosep corren a través de un profundo bosque, perseguidos por cazadores de la tribu Djindar. Mientras los salvajes se acercan, ellos buscan una salida. De repente, Hosep es capturado y arrastrado fuera de allí. Mientras tanto, Xena le hace bromas a una deprimida Gabrielle mientras intenta cazar un ciervo para la cena. Cuando el ciervo huye, las dos van a encontrarse con Virgil, quien está espiando en el asentamiento Djindar para el momento en que las dos mujeres llegan al abandonado campamento. Virgil se estremece cuando ve a Hosep siendo asado sobre un gran fuego. Preocupadas por la seguridad de sus amigos, Xena y Gabrielle navegan río abajo para buscarlos. Xena consuela a Gabrielle quien todavía está muy mal por haber asesinado accidentalmente a un chico inocente, Korah. En el bosque, Virgil, horrorizado por la muerte de su acompañante, cae en una trampa. Un terrible sonido se escucha y Virgil es liberado y es perseguido por el hombre Djindar Alpha y su tribu. Pronto es rodeado y llevado por los caníbales. De vuelta en el río, Xena y Gabrielle ven fragmentos del bote de Virgil. Sabiendo que no puede estar lejos, siguen remando y son repentinamente rodeadas por Djindars por todos lados. Xena deja inconscientes a tres de ellos, permitiéndose a ella y a Gabrielle saltar a tierra donde continúan peleado con los cazadores. Teniendo una oportunidad de matar a su oponente, Gabrielle duda. El cazador aprovecha la oportunidad para acuchillarla en la pierna y echarla a las furiosas aguas. Xena bucea y encuentra a su amiga enredada en una red de pesca. Mientras libera a Gabrielle, se da cuenta que la red es, en realidad, una colección de calaveras humanas. En la orilla, Xena resucita a Gabrielle y retira la hoja de su pierna, mientras le dice que se están enfrentando con caníbales.

Xena sale en busca de un lugar seguro para atender la herida de Gabrielle. Mientras tanto, de vuelta en la villa Djindar, Virgil se defiende sin éxito de sus captores, estos lo dejan inconsciente y lo lanzan en una celda. Virgil vuelve en sí cuando es mojado con agua fría por un enflaquecido prisionero llamado Rubio. Dándose cuenta de una tabla que sobresale con agua y comida, Virgil inmediatamente se dirige hacia ella. Le toma unos momentos darse cuenta que él es la cena de los Djindars y la comida es para engordarlo. Mientras tanto, Xena, esforzándose en escalar una ladera, es atacada inesperadamente con rocas y calaveras humanas que la hacen caer contra el río más abajo. Salvándose, regresa con Gabrielle, cuya condición se ha deteriorado seriamente. Esa noche, Xena llega a la cima con Gabrielle agarrada a su espalda.

En un esfuerzo por obtener algo de tiempo y llevar a Gabrielle a un lugar seco y seguro, Xena la coloca en el suelo y deja salir un grito de guerra mientras se va. Gabrielle es casi inmediatamente llevada por los cazadores. Cuando Gabrielle se despierta en la enfermería Djindar, está rodeada por caníbales y lanzada dentro de una caldera. Mientras, Xena se enfrente cara a cara con el hombre Alpha, quien apenas se escapa lanzando arena en sus ojos. De vuelta en la celda de la prisión, Virgil está asombrado cuando Gabrielle es atada con él y Rubio. Después, cuando los cazadores regresan a atender la pierna de Gabrielle, ella escupe en la cara de El Hacedor de Fuego. Virgil, confiado en que Xena vendrá a salvarlos, le dice a Gabrielle que se descanse. Xena, sin embargo, ahora rodeada por caníbales, lanza su chakram, derribando a tres de un golpe mientras el resto de los cazadores se lanzan contra ella. De nuevo en la celda, entra el Hacedor de Fuego, le lanza a Virgil la calavera de Hosep y sale con Gabrielle. De vuelta en el cañón, Xena lleva a los cazadores a caer por un lado del precipicio mientras la persiguen. Entonces, se dirige rápidamente a la villa donde Gabrielle ha sido colgada para ser rostizada. Los ojos de Gabrielle se abren completamente mientras el chakram corta las cuerdas que la aprisionan. Golpea a El Hacedor de Fuego con una vara y se une a Xena para salvar a Virgil. Mata a dos guardias, abre las rejas toma las espadas de todos mientras huyen.